| |||||
Entender la Biblia
Muchas personas consideran que la Biblia es un libro difícil de leer. Empiezan con buenas intenciones pero dejan de leer después de poco tiempo porque no pueden entender lo que leen. Es una lástima, porque (1) la Biblia es la auténtica palabra del Dios infinito que creó este universo y todo lo que se encuentra en él, revelando Su voluntad sobre cómo debemos vivir nuestras vidas, y (2) la Palabra de Dios es el poder salvador que Él aplica a las vidas de aquéllos a los que ha decidido salvar: nadie puede salvarse si está apartado de la Palabra de Dios.
Afortunadamente, Dios nos enseña cómo debemos interpretar las Escrituras para que podamos comprender lo que nos dice. Examinaremos ahora lo que el Mismo Dios nos dice sobre cómo debe entenderse la Biblia.
Sólo la Biblia, y en su totalidad es la Palabra revelada de Dios:
2 Timoteo 3:16 Toda la Escritura es inspirada por Dios, [literalmente, “es respirada por Dios”] y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,
2 Pedro 1:21 porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.
1 Tesalonicenses 2:13 Por lo cual también nosotros sin cesar damos gracias a Dios, de que cuando recibisteis la palabra de Dios que oísteis de nosotros, la recibisteis no como palabra de hombres, sino según es en verdad, la palabra de Dios, la cual actúa en vosotros los creyentes.
Apocalipsis 22:18 Yo testifico a todo aquel que oye las palabras de la profecía de este libro: Si alguno añadiere a estas cosas, Dios traerá sobre él las plagas que están escritas en este libro.
♦ Dado que la Biblia no es como otros libros (no ha sido escrita por hombres sino por el Dios infinito), tenemos que acudir exclusivamente a Dios para recibir instrucciones sobre cómo estudiarla y comprenderla. La Biblia ha de ser nuestra única autoridad. No podemos utilizar los vanos pensamientos de nuestras mentes manchadas de pecado para desarrollar las reglas de interpretación de la Escritura.
Cada palabra de la Escritura, cada carácter de los manuscritos originales, es perfecto y cierto:
Proverbios 30:5 Toda palabra de Dios es limpia; El es escudo a los que en él esperan.
Salmo 12:6 Las palabras de Jehová son palabras limpias, Como plata refinada en horno de tierra, Purificada siete veces.
Salmo 119:160 La suma de tu palabra es verdad, Y eterno es todo juicio de tu justicia.
Apocalipsis 21:5 …Y me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas.
Mateo 5:18 Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido.
Romanos 3:4 De ninguna manera; antes bien sea Dios veraz, y todo hombre mentiroso;…
♦ Dado que estas palabras son perfectas y verdaderas, no puede haber error o contradicción en la Biblia. Por tanto, si encontramos pasajes que parecen contradecirse, podemos estar seguros de que no estamos entendiendo uno de ellos correctamente. A menudo, Dios utiliza contradicciones aparentes para llamar nuestra atención sobre una enseñanza importante de la Escritura, obligándonos a estudiar con más diligencia.
La Biblia es el poder de Dios para la salvación:
Romanos 1:16 Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.
Romanos 10:17 Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.
♦ No hay un libro más importante en el universo. Dios no salvará a nadie que esté apartado del poder de Su Palabra. Es un asunto de gran importancia para toda la humanidad.
Sólo podemos entender la Biblia si Dios, el Espíritu Santo, abre nuestros ojos (espirituales) así como nuestras mentes y corazones para otorgarnos comprensión acerca de las Palabras infinitas de Dios:
1 Corintios 2:14 Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente.
Job 32:8 Ciertamente espíritu hay en el hombre, Y el soplo del Omnipotente le hace que entienda.
Lucas 24:45 Entonces [Cristo] les abrió el entendimiento, para que comprendiesen las Escrituras;
Salmo 119:18 Abre mis ojos, y miraré Las maravillas de tu ley.
♦ Tenemos que estudiar la Biblia humilde y devotamente, pidiendo a Dios que abra nuestros ojos espirituales y nos permita entender Su Palabra.
La Biblia explica que debemos comparar Escritura con Escritura (lo espiritual a lo espiritual) para comprenderla:
1 Corintios 2:13 lo cual también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las que enseña el Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual.
Juan 6:63 …las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida.
2 Pedro 1:20 entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada,
♦ La Biblia es su propio “Comentario” y “Diccionario”. No es la sabiduría del hombre, ni el estudio de la literatura secular griega quien define los significados de las palabras y expresiones, sino Dios. Debemos observar cómo utiliza Dios esas palabras en otros puntos de la Escritura.
♦ Dado que toda la Biblia está escrita por Un Autor, Dios, podemos comparar con confianza palabras y expresiones de una parte de la Biblia con otra. Dios nos dice que comparemos Escritura con Escritura (lo espiritual a lo espiritual), no lo histórico con lo histórico, o lo gramatical con lo gramatical como enseñan algunos teólogos de hoy en día.
Hasta un niño puede entender la Biblia, suficiente para lograr la salvación, si Dios otorga la comprensión:
2 Timoteo 3:15 y que desde la niñez has sabido [Timoteo] las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús.
Pero otro hecho clave (y un tanto sorprendente) es que la Biblia ha sido escrita de forma que los no creyentes tengan dificultades para comprenderla. Esto es coherente con el método de enseñanza de Jesús cuando caminaba y enseñaba en la Tierra:
Proverbios 25:2 Gloria de Dios es encubrir un asunto; Pero honra del rey es escudriñarlo.
Salmo 78:2-3 Abriré mi boca en proverbios; Hablaré cosas escondidas desde tiempos antiguos, Las cuales hemos oído y entendido;
(Esta "parábola" es toda la historia del pueblo de Israel, que es una imagen o tipo histórico del Evangelio).
2 Pedro 3:16 como también las otras Escrituras, para perdición de sí mismos. casi en todas sus [de Pablo] epístolas, hablando en ellas de estas cosas; entre las cuales hay algunas difíciles de entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen, como también las otras Escrituras, para su propia perdición.
Más ejemplos. Jesús hablaba al público general casi exclusivamente en parábolas:
Marcos 4:33-34 Con muchas parábolas como estas les hablaba la palabra, conforme a lo que podían oír. Y sin parábolas no les hablaba; aunque a sus discípulos en particular les declaraba todo.
Lucas 8:10 Y él [Jesús] dijo: A vosotros os es dado conocer los misterios del reino de Dios; pero a los otros por parábolas, para que viendo no vean, y oyendo no entiendan.
♦ La Biblia contiene muchos versículos que encierran un significado espiritual más profundo, escritos como parábolas y alegorías.
La Biblia da testimonio de sí misma al estar repleta, de principio a fin, del mensaje de Jesús, el Evangelio de Salvación, y muchas historias del Antiguo Testamento son en realidad parábolas históricas que nos apuntan a Cristo de una forma simbólica:
Hechos 3:18 Pero Dios ha cumplido así lo que había antes anunciado por boca de todos sus profetas, que su Cristo había de padecer.
Hechos 3:24 Y todos los profetas desde Samuel en adelante, cuantos han hablado, también han anunciado estos días.
Juan 5:39 Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí;
Hebreos 10:7 Entonces dije: He aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad, Como en el rollo del libro está escrito de mí.
Lucas 24:25-27 Entonces él les dijo: ¡Oh insensatos, y tardos de corazón para creer todo lo que los profetas han dicho! ¿No era necesario que el Cristo padeciera estas cosas, y que entrara en su gloria? Y comenzando desde Moisés, y siguiendo por todos los profetas, les declaraba en todas las Escrituras lo que de él decían.
♦ Al estudiar la Biblia, debemos buscar el Evangelio de Cristo en todos los pasajes que leamos. Cuando empecemos a ver a Cristo, podremos saber que nos estamos acercando al verdadero significado de un versículo.
Toda la Biblia contiene un significado Espiritual más profundo que está oculto en parábolas y alegorías dentro de versículos que parecen ser simples exposiciones históricas o morales. Cada exposición histórica y moral de la Biblia sigue siendo absolutamente cierta, pero podemos aprender todavía más examinando el mensaje Espiritual simbólico de estos versículos. Jesús tuvo que reprender por igual a Sus seguidores, y a los fariseos por intentar entender Sus palabras literalmente cuando su sentido era simbólico (con un significado espiritual más profundo). A continuación veremos algunos ejemplos:
Mateo 16:6-8 Y Jesús les dijo: Mirad, guardaos de la levadura de los fariseos y de los saduceos. Ellos pensaban dentro de sí, diciendo: Esto dice porque no trajimos pan. Y entendiéndolo Jesús, les dijo: ¿Por qué pensáis dentro de vosotros, hombres de poca fe, que no tenéis pan?
Juan 4:11,13 La mujer le dijo: Señor, no tienes con qué sacarla, y el pozo es hondo. ¿De dónde, pues, tienes el agua viva? Respondió Jesús y le dijo:Cualquiera que bebiere de esta agua, volverá a tener sed;
(confundió el agua literal con el agua espiritual, viva).
Juan 3:4 Nicodemo le dijo: ¿Cómo puede un hombre nacer siendo viejo? ¿Puede acaso entrar por segunda vez en el vientre de su madre, y nacer?
Y en el versículo 10 está la reprimenda de Jesús:
Juan 3:10 Respondió Jesús y le dijo: ¿Eres tú maestro de Israel, y no sabes esto?
Juan 11:11-13 Dicho esto, les dijo después: Nuestro amigo Lázaro duerme; mas voy para despertarle. Dijeron entonces sus discípulos: Señor, si duerme, sanará. Pero Jesús decía esto de la muerte de Lázaro; y ellos pensaron que hablaba del reposar del sueño.
Juan 6:51-53, 60-61,66 Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo. Entonces los judíos contendían entre sí, diciendo: ¿Cómo puede éste darnos a comer su carne? Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros.… Al oirlas, muchos de sus discípulos dijeron: Dura es esta palabra; ¿quién la puede oír? Sabiendo Jesús en sí mismo que sus discípulos murmuraban de esto, les dijo: ¿Esto os ofende?…Desde entonces muchos de sus discípulos volvieron atrás, y ya no andaban con él.
Lucas 24:45-46 Entonces les abrió el entendimiento, para que comprendiesen las Escrituras; y les dijo: Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los muertos al tercer día;
Jesús dice aquí que en las Escrituras del Antiguo Testamento estaba escrito que Cristo tenía que morir y resucitar al tercer día. Sin embargo, esto no está escrito de forma explícita en ningún lugar del Antiguo testamento, sólo se expresa de forma alegórica como en Jonás 1:17:
“Pero Jehová tenía preparado un gran pez que tragase a Jonás; y estuvo Jonás en el vientre del pez tres días y tres noches.”
Cristo apunta a este versículo del Antiguo Testamento mostrando que está describiendo alegóricamente Su resurrección en Mateo 12:40. Por tanto, Cristo nos enseña que para entender correctamente la historia de Jonás, tenemos que ver lo que nos cuenta acerca de la resurrección de Cristo.
Lucas 17:12,14-17 Y al entrar en una aldea, le salieron al encuentro diez hombres leprosos, los cuales se pararon de lejos Cuando él los vio, les dijo: Id, mostraos a los sacerdotes. Y aconteció que mientras iban, fueron limpiados. Entonces uno de ellos, viendo que había sido sanado, volvió, glorificando a Dios a gran voz, y se postró rostro en tierra a sus pies, dándole gracias; y éste era samaritano. Respondiendo Jesús, dijo: ¿No son diez los que fueron limpiados? Y los nueve, ¿dónde están?
En este relato vemos una de las indicaciones más claras de cómo tenemos que entender los aspectos espirituales de las Escrituras. Aquí, Cristo ordena a los diez leprosos que se muestren al sacerdote, como mandaba la ley del Antiguo Testamento. Esto era una referencia a las leyes ceremoniales del Levítico 14:2 que dice
“Esta será la ley para el leproso cuando se limpiare: Será traído al sacerdote,”
Cristo nos enseña en Su respuesta al leproso que su orden debía ser entendida espiritualmente, y que apuntaba a nuestra llegada junto al Gran Sumo Sacerdote (Hebreos 4:14) cuando nos salvemos. Jesús reprochó a los otros nueve leprosos que siguieran la orden literal de Dios ignorando la auténtica intención espiritual de Su orden de mostrarse ante Cristo, el Sumo Sacerdote, para dar gracias.
La Biblia es un libro Espiritual y no debe leerse únicamente como un libro de enseñanzas morales, de historia, de poesía, o de sabiduría. El centro de atención está en la mayor necesidad de la humanidad: la Salvación.
Juan 6:63 El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida.
Romanos 7:14 Porque sabemos que la ley es espiritual; mas yo soy carnal, vendido al pecado.
Así que podemos resumir las enseñanzas clave de Dios en lo que respecta a cómo debemos estudiar y entender la Biblia:
Ore siempre antes de estudiar la Biblia, ya que sólo Dios, el Espíritu Santo, puede abrir nuestros ojos y darnos comprensión sobre Su Palabra infinita.
Ha de saber que cada expresión de la Escritura ha sido redactada por Dios y es totalmente cierta; por tanto, estará en armonía con cualquier otra expresión. Si hay una contradicción aparente, aún no comprendemos una de las expresiones correctamente.
Debemos comparar Escritura con Escritura. La Biblia es su propio diccionario y define sus propios términos. Esto significa que según leamos la Biblia, debemos tomar notas cuando veamos un versículo o idea que parece estar relacionado con otros que hemos leído. Estudiar estos versículos conjuntamente puede ayudarnos a entenderlos mejor, dado que cada uno puede contener pistas diferentes para alcanzar el significado general. Otra consecuencia es que no consultamos diccionarios de griego o hebreo para encontrar el significado de una palabra bíblica; en su lugar tenemos que ver cómo utiliza Dios esa palabra griega o hebrea en otra parte de la Biblia. Hay herramientas excelentes para ayudarle en esta tarea, como la Concordancia Strong Exhaustiva o la Concordancia Analítica Young, así como el software de búsqueda en la Biblia para ordenador personal que puede conseguirse en el CD gratuito EBF1 de nuestro sitio web en: www.ebiblefellowship.com/free_cd. Desde el menú de Ayuda de este software se pueden descargar gratuitamente otros idiomas de la Biblia. Estas herramientas pueden ayudarnos a encontrar todos los versículos en los que se utiliza una palabra griega o hebrea en particular, sin necesidad de que aprendamos los idiomas originales.
Toda la Biblia, tanto el Nuevo como el Antiguo Testamento, está entrelazada con el evangelio de salvación de Dios, apuntando hacia la necesidad del pecador de alcanzar la salvación en el juicio venidero, el sacrifico expiatorio de Cristo en la Cruz, el hecho de que esta salvación es totalmente una obra soberana de Dios, o una verdad espiritual relacionada. Cualquier significado simbólico o alegórico ha de apuntar al final a Cristo y Su Evangelio, y tiene que ser coherente con el resto de la Escritura.
No se debe llevar demasiado lejos las parábolas y alegorías… al ser símbolos y sombras de la verdad hacia la que señalan, a veces no son aplicables a todos los aspectos de la verdad subyacente. Esto significa que enseñan algunos aspectos del fundamento hacia el que apuntan, pero pueden ser incompletos o implicar algún otro aspecto que es imposible aplicar. Aquí es necesario aplicar el principio recogido en el artículo nº 2: asegurarse de que las conclusiones a las que se llega son coherentes con el resto de la Escritura en lo que respecta a ese asunto.
Salmo 119:97 ¡Oh, cuánto amo yo tu ley! Todo el día es ella mi meditación.
Únase a nosotros para vivir la hermandad en directo a través de internet, o descargar gratuitamente estudios y tratados sobre la Biblia – visite:
Escúchenos en directo a través del área de “Internet Broadcasts” (Emisiones por Internet) de nuestro sitio web o siga las instrucciones del programa gratuito Paltalk. Puede llamar gratuitamente a EBible Fellowship: 1-877-897-6222 (sólo EE.UU.).
Puede dejar un mensaje, una pregunta o un comentario en:
www.ebiblefellowship.com/contactus.
O escríbanos a:
EBible Fellowship, P.O. Box 1393, Sharon Hill, PA 19079 USA
UTB.5.17.2009a.Spanish